El presente libro pretende mostrar un diálogo entre dos formas de
narración gráfica el álbum ilustrado y el cómic que pertenecen a
tradiciones diferentes y que han poseído, también, una consideración
cultural muy dispar. Sin embargo, es posible rastrear numerosos puntos
de encuentro que sirven para ilustrar parcelas menos atendidas de la la
obra de autores consagrados dentro del panorama de la novela gráfica. En
esa intersección de formas y poéticas se instalan ejemplos refractarios
a la clasificación estricta. Estas páginas surgen de la voluntad de
documentar una necesidad de contar que desborda y enriquece los moldes
formales.