Eladia Bautista y Patier entendió la poesía como algo más que un género literario: como su idioma de vida, como la forma más natural de decir el mundo, y de pensarlo. Cantó la realidad en versos frescos y sencillos, jugó con las palabras y con las imágenes ?en su poesía se hace fuerte la belleza?, y se adentró en temas graves y complejos ?la esclavitud o el servicio militar obligatorio?, combatiéndolos desde la luz de la razón. Yo invoqué a las nueve hermanas, antología con edición de Fran Garcerá, recoge algunos de los mejores poemas de esta escritora con la que se despide el siglo XIX,y transita por las principales preocupaciones de Bautista y Patier: una autora de vocación tenaz, con paso firme en esa vía alternativa ?estética y temática? construida por las poetas de su tiempo.