Pilar Adón nos ofrece un mundo en el que una sensación de peligro permanente se combina con el anhelo más profundo de encontrar el equilibrio y la tranquilidad. Los personajes de los trece relatos que conforman esta obra aspiran a estar constantemente en otro sitio y a ser lo que no son, conscientes de que, al final, tendrán que dar con la mejor manera de sobrevivir.