Juan Villoro domina todos los géneros. Le acompaña una extraordinaria reputación como novelista, cuentista, ensayista y, desde luego, cronista. Sin embargo, hasta ahora su teatro era poco conocido, sobre todo, para el público español. En las seis piezas y dos «escaramuzas» obras cortas reunidas por primera vez, encontramos personajes complejos que, mediante diálogos que transitan por lo familiar, literario y filosófico, construyen mundos heterogéneos y remotos con los que, sin embargo, el lector o espectador se siente muy familiarizado. Y es que los temas de estas obras dramáticas, a pesar de desarrollarse en espacios y épocas tan diferentes, son universales, pues atraviesan los sentidos del ser humano: la muerte del padre (Cremación), las imposturas intelectuales (El filósofo declara), el fútbol (El lamento del cancerbero), los vestigios de una guerra (La guerra fría), entre otros. Asimismo, su monólogo Conferencia sobre la lluvia ha tenido montajes en Italia, Japón, Chile, Colombia, Argentina, España y México.
«Villoro es, ante todo, muy sincero en su manera de entender la escritura teatral. No intenta ocultar que quiere comunicarse, de una manera nítida y directa, con un posible espectador, pero lo hace sin hacer concesiones a tanto teatro de mercado convencional que hoy circula por todos los escenarios del mundo».
Del prólogo, Guillermo Heras
«El gran viaje interplanetario es el que va del escritorio del dramaturgo al escenario. Después, aspiras a que el público y la crítica compartan ese planeta, a que los primeros estén ahí sin toser a causa de los virus de la Tierra y a que los segundos carezcan de una destructiva misión secreta».
Juan Villoro