Kasimir está muy contento de poder ir, finalmente, a la escuela de fantastelos. Sabe que allí aprenderá a usar su magia y hará amigos. Y es que solo tiene seis días de vida y ya ha aprendido por sí mismo a hablar y a leer. Pero el peligro se avecina: el peor enemigo de los fantastelos, el hombre de la mochila, merodea cerca del colegio. Con sus habilidades especiales, Kasimir deberá pensar en una solución...