Edelmiro el vampiro se volvía loco por la carne y se daba muchos atracones. Pero después de comer tanto, se sentía mal y tardaba mucho en hacer la digestión. Así que un día Edelmiro decidió que tenía que comer otras cosas: eran raras de aspecto y crecían en los huertos. ¡Y estaban deliciosas! Un divertido cuento en rima para animar a los niños a probar alimentos nuevos y educarlos en comer sano y variado.