Hemos vuelto al pueblo: nos esperan los abuelos, la tranquilidad y muy buenos momentos. El pueblo es muy diferente según la época del año: en primavera, los campos son verdes y todo florece, en verano, el sol quema la hierba y nosotros nos bañamos en el río, en otoño, el bosque se llena de colores y vamos a buscar setas. Un imaginario que explora la aventura de pasar un unos días en el pueblo.