¿Qué lleva a un hombre a desmoronarse, cuando, en apariencia, no ha sucedido nada importante? Dos años después de la ruptura con la Rubia y en plena convalecencia postoperatoria, el protagonista de esta novela sufre una crisis vital que no consigue explicarse y que le obliga a recluirse en sí mismo: un derrumbe que le sepulta en los escombros tardíos del desamor y en la memoria devastadora de la infancia, un eco persistente que, mudo a sus oídos, continuaba resonando dentro. Entre alucinaciones, recuerdos y desvaríos, Carlos Frontera intenta narrar ese eco en un libro que se atreve a hablar sobre los legados que aniquilan y que está regido por una pregunta decisiva: ¿Cómo sobrevivimos al hundimiento de nuestra propia historia?