Un especialista en interrogatorios es destinado a una ciudad de un país en guerra, donde cumple cada día con su oficio de forma implacable. Por la noche, el coronel no duerme. Un ejército de fantasmas, sus víctimas, invade sus pensamientos y se apodera de su mente cuando intenta conciliar el sueño. Junto al coronel, en la sombra, su ordenanza trata de no mirar, de no ver, de fingir que está en otra parte.